Milly Quezada asegura que empezó a cantar merengue porque extrañaba su país.

La dominicana Milly Quezada, conocida mundialmente como “La Reina del Merengue”, compartió detalles sobre su trayectoria en una entrevista donde recordó sus comienzos en Washington Heights durante la década de 1970.

Quezada, quien emigró de Santo Domingo a Nueva York junto con sus hermanos Rafael y Martín Quesada en 1965, es una voz poderosa en la comunidad dominicana ya que ayuda a los dominicanos a mantener vivas las tradiciones y la cultura.

En la entrevista con Eliecer Marte para PIX, Quezada habló que su conexión con el merengue comenzó como un simple acto de nostalgia. “Para sentir la nostalgia de no estar en el país, nos reuníamos. Alguien tenía una guitarra, otro una conga, otro maracas, y comenzábamos a cantar. Y fue algo bueno. Era algo sanador. Nos conectaba”, recuerda.

Lo que comenzó como una manera de mantenerse conectados con sus raíces pronto se transformó en un fenómeno musical.

En 1978, su hermana Jocelyn se unió al grupo familiar, formando la emblemática banda de merengue “Milly, Jocelyn y Los Vecinos”, que fue gestionada por Rafael Vázquez, quien más tarde se convirtió en el esposo de Milly.

La banda alcanzó un éxito internacional con canciones icónicas como “La Guacherna” y “Volvió Juanita”, esta última narrando la historia de una mujer dominicana que regresa a su país después de vivir muchos años en los Estados Unidos.

Desde entonces, Milly Quezada ha disfrutado de una carrera que abarca más de 45 años, durante los cuales ha lanzado más de 30 discos y ha roto barreras en un género dominado históricamente por hombres. Tras la muerte de su esposo en 1996, Milly continuó su carrera como solista, logrando un éxito sostenido. A lo largo de su carrera, ha ganado cuatro premios Grammy Latinos y fue honrada con el Premio a la Trayectoria de la Academia de Grabación en 2021, además de recibir múltiples premios Billboard y otros reconocimientos.

Hoy, cinco décadas después de sus primeros pasos en la música, la música de Milly sigue siendo bailada por millones de personas en todo el mundo, sin importar el idioma que hablen. “Solo me siento parte de la comunidad. No me siento superior de ninguna manera”, reflexionó Milly. “Soy una voz entre muchas voces que reflejan el amor por nuestro país y nuestras tradiciones”.

La entrevista concluyó con un momento especial cuando la periodista no perdió la oportunidad de bailar merengue con la reina misma, Milly Quezada.