CONDENAN A 30 AÑOS DE PRISIÓN A ÍTALO-COLOMBIANO POR DESCUARTIZAR VENEZOLANA.

Santo Domingo, RD.- El Tercer Tribunal Colegiado del Distrito Nacional condenó a 30 años de prisión al italo-colombiano Michael Saba por descuartizar a la venezolana Yenny Carolina Pérez Calderón en diciembre del 2023.

El imputado cumplirá la pena en el Centro de Corrección y Rehabilitación Najayo Hombres.

Además, Saba deberá pagar una multa de cinco millones de pesos por daños y perjuicios a la familia de la víctima.

El tribunal acogió la solicitud del Ministerio Público. El crimen ocurrió en una torre ubicada en el sector Piantini, en Santo Domingo.

El Ministerio Público pedía que Saba fuera declarado culpable de asesinato. También de uso ilegal de arma de fuego. Asimismo, la Fiscalía pedía que al imputado se le condenara al pago de una multa equivalente a 50 salarios mínimos.

La solicitud también incluía que, dada la representación legal privada del acusado, se le impusiera el pago de las costas penales del proceso judicial.

Petición de los abogados querellantes

Por su parte, los abogados querellantes respaldaron el pedimento del Ministerio Público. También solicitaron que, además de la pena de 30 años de prisión, Michael Saba se le condenara a pagar una indemnización de 30 millones de pesos por daños y perjuicios ocasionados a la familia de la víctima; el tribunal solo acogió cinco millones.

Declaraciones del italo-colombiano Michael Saba

En su manifestación final ante las magistradas, Saba acusó al venezolano Luis Alexander Gutiérrez Rodríguez de ser el responsable de la muerte de la mujer venezolana.

Luis Alexander Gutiérrez Rodríguez declaró en la audiencia anterior que se presentó en tres ocasiones a la torre ubicada en Piantini para llevar al imputado un sandwich de pierna, cigarrillos y, por último, una chica que el imputado pidió para hacer un trío.

Saba explicó que la chica duró alrededor de dos horas en el apartamento. También cuestiona que no la hayan llevado como testigo de la fiscalía.

Además, señala que las pruebas de pólvora en su ropa arrojaron un resultado negativo. También las huellas en el arma de fuego utilizada para ultimar a la víctima y el cuchillo utilizado para descuartizarla.

Mientras lo asistía un intérprete, negó las acusaciones de haber intentado expropiarse de la yipeta de la víctima.

Fuente: CDN.