Clemente Terrero: “no dije niño murió por rabia se la transmitió otro que lo mordió ni que se transmite de humano a humano”
Dr. Clemente Terrero
Barahona.- El subdirector médico del hospital Robert Reid Cabral, doctor Clemente Terrero, negó haber dicho el niño muerto a causa de rabia humana, ingresado en ese centro procedente de la fronteriza Pedernales, se la transmitió otro niño que le mordió.
A través de una llamada telefónica al Director de LALUPADELSUR, terrero, dijo que no ofreció esos detalles al periodista Faustino Reyes Díaz, colaborador de este medio digital en el municipio de Neyba, común cabecera de la provincia Bahoruco.
“Él escribe que yo afirmo que el niño que murió de rabia la adquirió porque otro niño que lo mordió se la transmitió. Yo no dije eso en la conferencia. Yo hablé del caso de un niño que está en vacunación que el niño que murió mordió a ese que está en vacunación”, aclaró.
Explicó que, “y le dije que como no hay casos registrados de que la rabia se transmite de humano a humano, además, de que ese niño cuando fue mordido por este no tenía ninguna enfermedad, la probabilidad de que esa mordedura la transmitiera (niño muerto), era sumamente baja, por no decir negativa”.
Además, niega haberle dicho al periodista Reyes Díaz ni en el conversatorio sostenido en Neyba, organizado por la Dirección Regional Sur del Colegio Médico Dominicano (CMD), que la enfermedad se transmite de humano a humano.
“Dije que los pacientes manejados por rabia, deben tomarse todas las medidas de seguridad porque, aunque no se ha visto el primer caso de transmisión de humano a humano, pudiera existir el riesgo de adquirirla, ya sea por contacto por secreciones, los ojos, una pinchadura”, expuso.
El reputado especialista e infectólogo, reiteró que sí habló de tomar todas las medidas de seguridad en el manejo de pacientes con síntomas de rabia humana “no que esta se transmitía de humano a humano”.
Con el tono de voz pausado que le caracteriza, el doctor Clemente Terrero reconoció que no hay intención del periodista en causarle el daño que pudiera provocar la información redactada en forma no adecuada, sino que la atribuye a un error de interpretación del profesional de la comunicación.
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